En Baja California, la población vulnerable por carencias sociales reportó un aumento al pasar del 34.4% de los habitantes en el Estado en 2020 a 38% en 2024, de acuerdo con los resultados que dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En análisis de las cifras corresponden al año estadístico previo a la gubernatura liderada por Marina del Pilar Ávila Olmeda, que muestran las condiciones del grupo de personas más vulnerables en el Estado.
De tal manera, 137 mil 806 personas más pasaron al grupo de la población con carencias sociales en la entidad, para sumar un total de Un Millón 437 mil 554 personas, que es aquella presenta al menos una carencia en sus derechos sociales, como el rezago educativo, el acceso a servicios de salud o a la seguridad social.
Cabe recordar que en el Cuarto Informe del gobierno de Baja California se presumió la reducción de la pobreza, sobre todo, la referente a quienes se encuentran en pobreza extrema, sin embargo, soslayaron mencionar que lo anterior se debe al incremento del presupuesto para programas sociales producto de la fuerte recaudación de Impuestos propios al sector productivo local, situación que impactó a la actividad económica en general al contraerse 1% real al segundo trimestre de 2025, de acuerdo con INEGI.
En ese sentido, se puntualiza que los apoyos sociales ayudan en el corto plazo para satisfacer alguna necesidad, por lo que al ser encuestados, las personas pueden responder que les alcanzó para cubrir una urgencia, empero, no significa que se haya erradicado el problema, por el contrario, continuará con la necesidad de ser cubierto con más apoyo.
Por lo que la disminución de la pobreza extremas es un efecto artificial, porque para ser natural, el Estado tendría que generar las condiciones para impulsar el crecimiento económico, y así, fortalecer las oportunidades de empleos con mejores condiciones para que los ciudadanos, por su propia cuenta, puedan salir adelante.
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